Asomarse a la noche, al sábado, al día que sea, de puntillas, como si fuera el último y debiera durar siempre. Seamos pequeñitos inundados de asombro.
Soñemos bien, soñemos lejos.
Ilustra Akiko Miyakoshi
Sole Felloza escribe desde el 2004 en su caja y deja hilos sobre viajes, literatura, fotografía, recetas…